Son muchos los que adoran a jugadores de futbol trasladándolos al nivel incluso de de hecho, el marketing traslada a sus tiendas y a las masas sociales la vestimenta y objetos personalizados con los nombres de los ‘cracks’…la pregunta que me realizo en este momento es sencilla pero complicada a la vez: ¿Deben los entrenadores tener también ‘su’ camiseta y su marketing? Aunque sea con el número 00 o el Mr. delante del susodicho nombre.
El debate de si el entrenador puede llegar a ser fundamental en un equipo o no siempre seguirá existiendo, pero analizando el momento, el tiempo nos ha demostrado en solo una temporada que puede llegar a serlo. Hablo como no de Josep Guardiola i Sala, o más bien Pep Guardiola o simplemente Guardiola.
Tras una dilatada carrera como futbolista, y aun sin retirarse oficialmente, Decidió cursar el título de entrenador de futbol, consiguiéndolo en julio de 2006.El 15 de Noviembre de 2006 se retiró oficialmente, pero Guardiola tenía una ventaja: En su etapa como futbolista ya era más que eso, su carisma y personalidad, le erigieron como líder dentro del campo, así como sin duda su precisión con el balón y visión de juego.
Desde su obtención del título de entrenador, ya comenzó a cosechar éxitos: Ascendió al Barça de Tercera División a Segunda B, quedando campeón absoluto. Tras un año difícil del primer equipo, el staff técnico decidió apostar muy fuerte por él, un hombre de la casa reconocido por todos, con el reto de reconducir un vestuario perdido y desahuciado. Y vaya si lo hizo.
Guardiola trasladó sus ideales al vestuario desde el primer minuto que lo pisó: un hombre íntegro, con una vida cuidadosamente ordenada y sana, meticuloso y muy serio en su trabajo, pero sobre todo SENCILLO. A lo largo de la temporada no ha querido conceder entrevistas a ningún medio, él se justificaba diciendo que daba seis ruedas de prensa a la semana y eso era suficiente, además de trasladar siempre el protagonismo a sus jugadores.
Ha demostrador no ser muy ‘amigo’ de las cámaras y flashes: "El mérito es de los jugadores, soy muy afortunado" rezaba el de Santpedor a lo largo de la temporada, pero el caso es que a sus 38 años ha conseguido hacer historia: ganar la Copa del Rey, el título de Liga y la Liga de Campeones de la UEFA en una sola temporada, y encima en su debut. Y me permitiré el privilegio de decir que algo tendrá que ver su figura, cuando el único fichaje respecto a la pasada campaña ha sido el de Gerard Pique, y tras la decisión del propio Pep de prescindir de los servicios de jugadores como Ronaldinho y Deco.
Pep se merece su reconocimiento, y aunque como dijo él, proponerlo para el Principe de Asturias de los Deportes es algo descabellado, quizá el tiempo nos haga a opinar a todos lo contrario, pero, aunque aun es muy joven, el propio Pep ya confesó que no quería prolongar mucho su carrera…y es que a buen seguro no querrá quedarse sin tiempo para disfrutar de su pareja Cristina y sus hijas Marius, María y Valentina.
Como dijo Tagore: Cuando somos grandes en humildad, estamos más cerca de lo grande. Así es Pep
